7 de Julio de 2011
Philadelphia-Wsahington
Empiezan las andanzas de la ratita por el mundo, y muchos me habéis pedido que sea vuestros ojos, lo intentaré, pero recordar que soy una ratita, y que mis ojos son pequeños, así que me perderé muchas cosas, y a veces mi visión es desde aquí abajo, por lo que vosotros tendréis que darle otra perspectiva más alta.
No será fácil asumir esta responsabilidad, ya que cada uno vería este mundo de formas muy diferente y además será difícil ser objetivo, ya que las experiencias que viva en primera persona condicionarán mis opiniones. Esto además hará que cada uno de vosotros pueda hacer los comentarios que crea oportunos, y no me responsabilizo de estos.
Y después de este alegato eximiéndome de cualquier responsabilidad de las opiniones que aquí se recojan empezaré por el principio.
Había una vez, una ratita que vivía en su pequeño mundo, con su escoba, su lacito y pocas cosas que esperar de la vida, cansada de esperar, y de esperar a que el mundo cambiara, decidió que igual el mundo no era el que tenía que cambiar, sino su propia visión de ese.
Que podrías hacer ella para solucionar este problemilla de percepciones?
Tras darle muchas vueltas, intentar redirigir su vida profesional, cambiar de casita de ratones, intentar abrirse paso en el mundo de la alta costura, etc. se dio cuenta de que no llegaba a nada claro, que seguía vacía, así que…decidió dar un paso de RATÓN, un pequeño paso para otras ratita, pero un enorme para alguien con ella, asustadiza, temerosa de todo, indecisa e insegura…RECORRER EL MUNDO CON LA SU MOCHILA DE EXPLORADORA y aquí estoy.
Ahora mismo en mi noveno día de viaje desde que salí de casa.
Fue una locura, vaciar la casita que durante 6 años había ocupado la ratita no fue fácil, y no solo físicamente, que fue agotador, a pesar de la enorme ayuda de todos lo que echasteis una mano de una forma u otra, sino psicológicamente, una piensa que es fácil pero nada de eso amigos, fue doloroso, por que dejas atrás muchas cosas, buenas y malas, vacías un espacio de cosas materiales, pero tu corazoncito tiene que asumir que hay muchas otras, que también se quedan en esas cajas, que se quedarán atrás por mucho tiempo, y …buuf, no imagináis que vértigo da eso.
Al final subí a un avión con destino a NY, la ciudad de las oportunidades dicen, pues bien, mi opinión es diferente.
Philadelphia-Wsahington
Empiezan las andanzas de la ratita por el mundo, y muchos me habéis pedido que sea vuestros ojos, lo intentaré, pero recordar que soy una ratita, y que mis ojos son pequeños, así que me perderé muchas cosas, y a veces mi visión es desde aquí abajo, por lo que vosotros tendréis que darle otra perspectiva más alta.
No será fácil asumir esta responsabilidad, ya que cada uno vería este mundo de formas muy diferente y además será difícil ser objetivo, ya que las experiencias que viva en primera persona condicionarán mis opiniones. Esto además hará que cada uno de vosotros pueda hacer los comentarios que crea oportunos, y no me responsabilizo de estos.
Y después de este alegato eximiéndome de cualquier responsabilidad de las opiniones que aquí se recojan empezaré por el principio.
Había una vez, una ratita que vivía en su pequeño mundo, con su escoba, su lacito y pocas cosas que esperar de la vida, cansada de esperar, y de esperar a que el mundo cambiara, decidió que igual el mundo no era el que tenía que cambiar, sino su propia visión de ese.
Que podrías hacer ella para solucionar este problemilla de percepciones?
Tras darle muchas vueltas, intentar redirigir su vida profesional, cambiar de casita de ratones, intentar abrirse paso en el mundo de la alta costura, etc. se dio cuenta de que no llegaba a nada claro, que seguía vacía, así que…decidió dar un paso de RATÓN, un pequeño paso para otras ratita, pero un enorme para alguien con ella, asustadiza, temerosa de todo, indecisa e insegura…RECORRER EL MUNDO CON LA SU MOCHILA DE EXPLORADORA y aquí estoy.
Ahora mismo en mi noveno día de viaje desde que salí de casa.
Fue una locura, vaciar la casita que durante 6 años había ocupado la ratita no fue fácil, y no solo físicamente, que fue agotador, a pesar de la enorme ayuda de todos lo que echasteis una mano de una forma u otra, sino psicológicamente, una piensa que es fácil pero nada de eso amigos, fue doloroso, por que dejas atrás muchas cosas, buenas y malas, vacías un espacio de cosas materiales, pero tu corazoncito tiene que asumir que hay muchas otras, que también se quedan en esas cajas, que se quedarán atrás por mucho tiempo, y …buuf, no imagináis que vértigo da eso.
Al final subí a un avión con destino a NY, la ciudad de las oportunidades dicen, pues bien, mi opinión es diferente.
Como cambia esta ciudad cuando uno la visita como turista, con dinerillo en los bolsillos, para gastar en las tiendas, restaurantes, etc. Pero, y este PERO es en mayúsculas, las cosas cambian cuando lo que quieres es solamente moverte pro la ciudad, ir de un lado a otro, coger un tren o encontrar una dirección, aahh, eso cambia las cosas.
Veamos, esta visión empezó a cambiar cuando intenté comprar un billete de bus para ir a Jersey a ver los “fiereworks” del famoso 4th July, bien, en la estación no hay una sola ventanilla de información, ni un panel, nada de nada, la gente que trabja en los establecimientos de la propia estación…ah, ni idea, ellos dicen que no son información, y por lo que veo no es un problema hacia mí, que por ser pequeña y una ratita pienso que es algo personal, por que llega una mujer que quiere cambiar 5$ y la dicen que eso no es una oficina de cambio, bien, está claro, esto es una tienda y solo atienden…si compras algo.
Creo que pregunté a unas 8 personas, que no tenían ni idea de lo que hablaba, otra cosas curiosa, si vas a comprar de repente hablan nuestro idioma, si “Español, español” pero si no hay CASH nada de spanish.
Al fin logro el dichosos billete, con la mediación de un tipo que está allí, junto al mostrador de información que está cerrado, pero él parece que orienta a todo el que pasa por allí, pero…este si que me vio cara de pequeña ratita, por que en efecto, me ayuda, me lleva a la máquina, me ayuda a sacar el billete, y…tachan..se queda con todo el cambio de la máquina, pero: - Oiga señor, que es mucho Money para mí -(eran 6$) Tras una discusión, con poca convicción de ganar por mi parte, logro que vuelvan a mi bolsillo algunas moneditas, con el enfado del tipo, grandullón que se va y no sé donde tengo que ir a coger el dichosos bus.
De nuevo búsqueda del andén de mi bus, y una mujer que limpia por la estación me ayuda menos mal, esa mujer ha salvado a la población de Manhattan de que en esta entrada del blog los tachara a TODO de insociables, y antipáticos, diré que solo algunos lo son.
Y para dejar una nota positiva, diré que ver el espectáculo de fuegos artificiales desde el otro lado del río fue maravilloso, con el Empire State en frente, el edificio Chrysler…mereció la pena.
Y como primera crónica e introducción, creo que es suficiente, pero no os perdáis el siguiente episodio.
Washington DC, uno de los lugares de mayor seguridad del planeta, en los carteles de entrada al museo leo: “no food, no drinks, no gun”…
to be contined.
