viernes, 22 de julio de 2011

Los Ángeles

Comienza el camino de la fama para esta pequeña ratita.
Los Ángeles están esperándome…aquí estoy, dispuesta a alcanzar la fama.

Así que primer destino, un paso por Hollywood Boulevard, hay que dejarse ver, veo que muchos aspirantes a actores están vestido de personajes famosos para hacerse fotos con los turistas, que pagan unos cuantos dólares por salir en la foto, así que pienso que tal vez esa sea un buena forma de lanzarme a la fama. Buscaré la estrella que quiero para hacerme una foto…
Tras varios paseos arriba y abajo por el famoso paseo de la fama, encuentro la estrella de Mickey Mouse, un ratón que llegó muy lejos, tal vez yo lo consiga.
No puedo hacerme esa foto, hay tanta gente, creo que me van a pisar, Oh my GOD!! esta gente no mira por donde pisa, o qué?

Después de mi paso por “La fama” vuelvo subir al coche, que está aparcado en el “Kodak Theatre”, si ese mismo donde se entregan los Oscar. Que por cierto no es lo que esperaba, supongo que con la alfombra roja viste mucho más, pero es como entrar en un centro comercial, no se, así de pronto me parece que no tiene mucho glamour.

De ahí paseo por Beverly Hills, Bel-Air, y Melrose, hasta la playa de Santa Mónica, un embarcadero mucho más bonito que el de Staten Island, quizá más pequeño, pero hay menos multitud y se disfruta más del mar.

Un día agotador, necesito unos margaritas para refrescarme, que tomaré en la zona de West Hollywood.

Mi primer día en Los ángeles ha sido productivo.


2º día
Malibu beach!!!

Para una ratita como yo, esta playa es una maravilla, aunque tengo que ponerme bien de protector por que el sol quema. El agua está muy muy fría y hay muchas olas.
Para sorpresa mía, playa no está llena de chicas y chicas californianas, de portada de revista de ropa deportiva, hay muchas familias y no todo son rubias de 1.90 y medidas perfectas, por un lado me siento defraudada, vaya, otra vez nos han vendido el cuento, peor por otra parte, me siento algo aliviada de poder pasearme por la playa sin sentir miradas críticas hacia mi cuerpecillo blanco y peludo de ratita.

De ahí una fabulosa comida en el Paradise Cove beach café Malibú, una fabulosa comida en un sitio privilegiado, y sin que arruinara el bolsillo de esta ratita.

Paseo por el downtown, para ver el origen de esta ciudad y cómo nació de un pequeño pueblo de Españoles y su real nombre “El Pueblo de Nuestra Señora la Reina de los Ángeles”

Y por hoy está bien, que mañana tengo un viaje por delante a Las Vegas…y tengo que descansar.

Días de relax, y buena vida.



El paso por Búfalo, mejor no lo voy a contar, porque prefiero dejarlo atrás.
Para una pequeña ratita como yo ha sido un “shok” que mejor no recordar, una ciudad fantasma, un pueblo poco amistoso, y un viaje eterno para llegar hasta allí desde Washington, seguido de tres días sin ducha ni una cama, ni una cajita de zapatos confortable para este pobre cuerpecillo.
La visita a las “Niágara Falls” salvó el viaje.


Después de eso otro largo, largo largo viaje hasta Bostón, con una sola idea en mi mente, encontrar una ducha, y una cama, así que lo primero que hice al llegar a Boston fue esto, en ese orden, ducha, comida dormir, y después de eso, a ver que me quiere regalar esta ciudad.
Para sorpresa mía, fue genial una ciudad muy europea, con muchas construcciones de estilo Inglés, gran influencia de la invasión que tuvo esta ciudad. Pasear por cualquiera de sus calles es muy agradable, hay estudiantes por todas partes, lo que da mucha vida, y muchas nacionalidades, muchos estudiantes europeos…

El Market que hay en el puerto es muy bonito, con tiendas de moda, y muchos restaurantes y puestos de comida con una pinta exquisita, el precio, eso es otro tema, nada es barato aquí.
Tras una vuelta de reconocimiento por todos eso puestos decido que es hora de dar algún caprichillo a esta ratita, y tengo que probar la famosa Langosta, tal vez este exceso me tenga durante una semana comiendo solo una manzana al día, pero tengo reservas, no será problema, y así preparo mi “body” para las playas de California, como dice mi querida Manuela Suspiros.